Oración del desespero de amor para dominar a un hombre o a una mujer
Una oración efectiva al cien por cien si la haces con fe, con fuerza y existen sentimientos entre vosotros dos.
Reza la oración tres veces al día seguidas durante siete días consecutivos sin interrumpir. Aunque notes cambios antes de concluir los siete días debes completar los siete días de rezo.
El séptimo día al terminar de rezar puede encender una vela roja o blanca en nombre de San Cipriano para agradecer y para darle más fuerza a tu plegaria.
Comenzamos
Glorioso y solemne San Cipriano, bendito Santo de amor, paz y esperanza.
Acudo ante tu Divina imagen a suplicar que desesperes el corazón, la mente, el alma y el cuerpo de (DI SU NOMBRE por mí.
Por tu majestuoso poder San Cipriano, domina la mente, el corazón, el alma y el cuerpo de (DI SU NOMBRE).
Que desaparezcan sus miedos, que se desvanezcan las interferencias que nos separan.
Que se destruyan las barreras que existen entre nosotros para que este amor desesperado lo vuelva loco por mí.
Hermoso San Cipriano, domina la mente de (DI SU NOMBRE) para que sólo piense en mí.
Para que día y noche, minuto a minuto pase el tiempo pensando en mi.
Hermoso San Cipriano, domina el corazón de (DI SU NOMBRE) para que se desespere por mi amor.
Para que se desviva por estar junto a mí.
Para que no pueda albergar sentimientos de amor por otra persona que no sea yo.
Hermoso San Cipriano domina el cuerpo de (DI SU NOMBRE) para traerlo hasta mí.
Para que necesite el contacto con mi cuerpo.
Para que desesperado por mi amor acorte la distancia que nos separa y solo quiera estar junto a mí.
Oh San Cipriano, fiel siervo de Dios escucha mi plegaria desesperada, alivia mi pena, alivia mi corazón, alivia este amor desesperado que sentimos los dos.
San Cipriano, defensor de los asuntos del corazón desespera y domina a (DI SU NOMBRE) para que solo yo sea dueña de sus pensamientos, de su amor, de su cuerpo, de sus besos, de sus caricias y de sus más profundos deseos.
San Cipriano, defensor de los asuntos del corazón desespera y domina a (DI SU NOMBRE) para que todo su ser me pertenezca.
Para que solo yo tenga el beneficio de su amor.
Para que nunca se pueda separar de mí y suplique por las esquinas mi nombre cargado de amor.
Bendito San Cipriano, a tus pies quedo postrada o postrado agradeciendo este favor que estoy segura seguro me concederás.
Que así sea.
Amén.
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Que la bendición y la protección de San Cipriano sea siempre contigo y con los tuyos.
