Oración que te impresionará, te sorprenderá

Con solo rezarla un día ya notarás cambios positivos en aquello que te atormenta, te preocupa o te inquieta.

Aún así es necesario que completes todos los días del rezo. Se trata de una oración a la Virgen del Perpetuo Socorro, Milagrosa y Misericordiosa en situaciones difíciles y desesperadas.

Reza esta oración siete veces seguidas al día durante siete días consecutivos sin interrumpir.

Hazlo con fe con mucha fe en la Santísima Virgen del Perpetuo Socorro,  ella te ayudará desde el primer día.

El séptimo día cuando acabes de rezar puedes encender una vela blanca en nombre de la Virgen del Perpetuo Socorro para agradecer.

Es conveniente rezar esta oración en soledad.

Comenzamos.

Oh Madre, Santa, Sagrada Virgen del Perpetuo Socorro.

Vengo a ti con un peso muy grande sobre mis espaldas, con un dolor que me perfora el corazón, con una angustia que desespera mi alma y con un desconsuelo que me aflige cada día.

Bendita Virgen del Perpetuo Socorro.

Permíteme dirigirte mi plegaria que desahogue mis penas ante tu Santa presencia.

Que cuente con tu luz milagrosa en este oscuro pozo del que no consigo salir por mis propios medios.

(EN ESTE MOMENTO DEBES HACER TU PETICIÓN PERSONAL Y CONTINUAR LA ORACIÓN)

Madre Sagrada, Hermosa Reina Celestial, Virgen del Perpetuo Socorro.

Tu mirada dulce y serena apacigua mi corazón y me proporciona paz y armonía.

Siento esa mirada que me bendice, me protege y me auxilia en esta amarga circunstancia.

Te pido que con urgencia, intercedas con tu poder inmenso, corras, que no demores tu ayuda y extiendas tu manto para cubrirme por completo y sanar cada una de mis heridas.

Para borrar todos y cada uno de mis malos recuerdos, restaurando así la inocencia que he perdido, la esperanza que se ha desvanecido entre mis manos y la felicidad qué tan lejos siento de mí.

Oh Señora Milagrosa Virgen del Perpetuo Socorro.

En mis malos momentos siempre te nombraré, en las tentaciones que pongan en peligro mi camino siempre te invocaré, en los buenos y felices momentos siempre contigo los compartiré y gracias por ellos te daré.

Porque a mi lado siempre estás.

Porque con tu ayuda eternamente podré contar.

Porque eres mi Santa Madre y yo tu leal hija o hijo, sierva o siervo fiel y abnegada o abnegado, devota o devoto.

Gracias Madre.

Amén

Reza esta oración siete veces seguidas al día durante siete días consecutivos sin interrumpir.

Hazlo con fe, con mucha fe en la Santísima Virgen del Perpetuo Socorro, ella te ayudará desde el primer día.

El séptimo día cuando acabes de rezar puedes encender una vela blanca en nombre de la Virgen del Perpetuo Socorro para agradecer.

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Que la bendición y la protección de la Virgen del Perpetuo Socorro esté siempre contigo y con los tuyos.